La moda tiene la capacidad de contar historias, y este jueves, el Centro Cultural de Carbajosa se convirtió en el escenario de un desfile único, donde cada puntada evocaba un relato de tradición, sostenibilidad y pasión.
Más de un centenar de personas se congregaron en la sala de exposiciones para descubrir la “Colección Lola”, la última creación de Belén Sánchez, una diseñadora atípica que, lejos de las pasarelas convencionales, ha convertido su amor por la costura en una expresión artística y un homenaje personal.
Belén, psicóloga sanitaria de profesión, encontró en la costura una vía de escape y creatividad. Lo que comenzó como un simple pasatiempo al diseñar sus primeros trajes para la Feria de Abril junto a sus hijas, se ha transformado en una experiencia inolvidable que ha culminado en este tercer y último desfile de su trilogía.
Con la sostenibilidad como bandera, la diseñadora ha confeccionado los 53 trajes que conforman esta colección a partir de materiales reciclados, otorgándoles una segunda vida y desafiando los estándares tradicionales de la moda flamenca.
Pero la innovación no solo radica en los tejidos, sino también en las modelos. Lejos de recurrir a profesionales, Belén ha querido que sus hijas y sus amigas fueran quienes dieran vida a sus diseños sobre la alfombra gris que presidía la exposición, creando así un ambiente cercano y familiar.
El nombre de la colección, “Lola”, rinde homenaje a su madre, quien trabajó como modista antes de formar una familia numerosa. Con este desfile, Belén ha querido reivindicar el esfuerzo de tantas mujeres que, con una máquina de coser y muchas horas de dedicación, lograban compaginar la crianza con su pasión por la costura.