Llegada la medianoche, las luces de la Plaza de Toros se apagaban para dar comienzo a casi cuarenta minutos de pirotecnia en el que los colores y las chispas inundaban la arena del ruedo. Actividades como esta son siempre bien acogidas por los vecinos, asombrados con cada movimiento y habilidades de los protagonistas.
Un espectáculo en el que malabares, música y danza se combinaban para que los 1150 asistentes disfrutaran del evento fascinados por la perfección visual de los fuegos, marcando el fin de la programación de las Fiestas Patronales en honor a San Roque.
Llegados a este punto, los vecinos de Carbajosa cogerán fuerzas para que en unos días, vuelva a iniciar la cuenta atrás hasta San Roque 2025.