Carbajosa celebra un Halloween arropado por más de 1.300 personas

A las 17:00 horas de la tarde de este domingo, las puertas de la pista de tenis cubierta se abrían albergando en su interior, una mezcla perfecta entre terror y el clásico olor de la castaña salmantina o también conocida como calboche.

Y es que hoy, 31 de octubre, ha regresado en su total plenitud uno de los eventos que la pandemia obligó a frenar por el camino. Una tarde en el que la risa -y muchas veces el llanto- de los más pequeños protagonizó el ambiente de una jornada pasada por agua.

Circunstancias que no han impedido el normal desarrollo de la programación, eso sí, teniendo que prescindir desde el Ayuntamiento de las actividades “de calle” más marcadas como la batukada y el tren de la bruja.  

Una organización cuidada y medida, que se ha dejado notar positivamente en los accesos, las esperas y como no podía ser de otra manera; también a la hora de disfrutar de los distintos escenarios.

Diversos puestos de feria clásica, carpas del terror, juegos y hasta una pareja de monstruos con más de dos metros de altura que juntos y por separado, se han convertido en los celebrities de la tarde con una constante petición de fotografías.

A la salida de cada grupo de participantes, La Patatería de Salamanca, de la mano de Asadina, han obsequiado a todo aquel que así lo deseaba con una bolsa de castañas asadas haciéndoles participes de una tradicional castañada al más puro estilo salmantino.

Un evidente éxito de participación que trae con ello también, un pasito más en el camino hacia la total normalidad de nuestra vida social.