Con la grada teñida del color de las peñas junto a un buen numero de vecinos, vecinas y visitantes, la charanga “Queloque's Band”, ha amenizado la cita.
Una de las actividades más esperadas por los jóvenes de la localidad es, sin lugar a dudas, la suelta de vaquillas. Dos años de espera que finalizan en la jornada de esta tarde entre adrenalina, risas y algún que otro susto.
Las ganas de fiesta eran palpables, aunque a más de uno ya se le hace cuesta arriba sumar un día más de fiesta como para arrancarse en las vaquillas. "Vienes reventado de estar por ahí todas las noches de marcha", comentaba un joven que ha acudido a la Plaza de Toros en compañía de un numeroso grupo de amigos.
En el albero, las vaquillas han saltado al escenario central, haciendo que los grupos de valientes comiencen la carrera y hasta envalentonando algún recorte. Los astados también se han llevado por delante a más de uno a base de revolcones, por eso, como siempre se ha dicho, los toros se ven mejor desde la barrera. "No nos atrevemos a bajar. Se está mejor aquí, viéndolo desde la distancia", aseguraba una vecina sin perder detalle de lo que sucedía en la arena.
En la grada también han sonado los temas incombustibles. La charanga ha puesto una vez más la nota musical a esta primera capea. "Hay buen ambiente, buena música y estamos disfrutando", señalaba una joven.
En el exterior, momentos de tensión fruto de no poder dar acceso a un gran número de asistentes ya que, en cuestión de minutos, se colgó el cartel de aforo completo.
La siguiente cita en el ruedo está prevista para el martes pero, esta vez, en horario nocturno. Será a las 22:00 horas.
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